Y uno entra en el templo que lleva mil años abandonado, y sus pies hollan las baldosas perfectas que llevan diez siglos sin recibir el peso de un humano. Apenas una leve pátina de polvo las cubre. Uno pregunta si sus moradores murieron o si simplemente se fueron, y no encuentra pistas porque no sabe leer la extraña escritura que cubre las paredes.
Es que no tienen ni un sólo acento, y uno no se orienta con ellas.
15 comentarios
Microalgo -
Microalgo -
Es que no tienen ni un sólo acento, y uno no se orienta con ellas.
Se siente uno raro, aquí.
Microalgo -
En fin, piropo lanzado al espacio exterior.
Abrazotes.
Microalgo -
¿Oiga?
Eco-éco-éco-éco...
Microalgo -
¿Está Usted vivo, Maese Wijttewal?
Dé dos golpes para "sí" y uno para "no".
Microalgo -
Si es así, aprovecho para felicitarle el año nuevo, así como a todos los extraños que aún se asoman a un blog telarañado.
Microalgo -
Le echamos de menos un montonazo ASÍN de grande, maese Jules.
Microalgo -
Y como ve, sigo asomándome. Porsi aca. Soy un pesado.
Niha -
Microalgo -
Microalgo -
Microalgo -
Dé dos golpes si no y sólo uno si sí...
Microalgo -
Microalgo -
Casi todas las fotos que miramos, especialmente si nuestra cara está en ellas, son fotos de fantasmas (Antonio Muñoz Molina: Las apariencias).
Manoliño Captura -